Etiqueta: técnicas de grupo

2
Oct

40 años de aventura profesional

40 años Haize Gain Gabriel Roldan

Haize Gain en 2022

Grupo de trabajo, Haize Gain, años 80

Psicoterapia de grupo, Haize Gain, años 80

Hace ya 40 años que empezó mi aventura profesional en la psicología. En junio de 1982, recién titulado por la universidad Autónoma de Barcelona, participé en una convocatoria abierta de Diputación para crear el “primer centro de drogodependientes en régimen de internamiento del País Vasco”.

Fui elegido como psicólogo y el 23 de septiembre de ese mismo año se abrió la Comunidad Terapéutica de Haize Gain, gestionada por Agipad, donde ejercí durante 20 años como psicólogo y director. Esta etapa fue una intensa experiencia profesional y personal. Desde entonces soy un entusiasta de las comunidades terapéuticas y de la terapia de grupo.

Iniciamos nuestra vida en el grupo familiar y posteriormente vamos creciendo, desarrollándonos, incluso enfermando, en los diferentes grupos por los que transitamos. En ellos establecemos los vínculos que nos van conformando y sosteniendo a lo largo de la vida.

Este jueves 23 de septiembre de 2022, regresé a Haize Gain 40 años después y me inundaron emociones de todas las experiencias vividas, también me ilusionó ver que sigue siendo un magnífico centro para afrontar los problemas con las drogas. Es un lugar en el que se respiran la calma y la pausa necesarias para encontrarse a uno mismo.

Quiero dar las gracias a todos los profesionales que han formado parte de este proyecto, y a todos los pacientes, que durante años me enseñaron tantas cosas.

Equipo de la Comunidad, de izquierda a derecha: Txema Fernández, Javier Aramburu, María Eugenia Lijó, Asun Berasategui, Cinta Guinot. Años 80.

Equipo de la Comunidad, de izquierda a derecha: Txema Fernández, Javier Aramburu, María Eugenia Lijó, Asun Berasategui, Cinta Guinot. Años 80.

 

Fotografía con Julen Perurena, psicólogo y José Luis Arrese, psiquiatra. Años 80

Fotografía con Julen Perurena, psicólogo y José Luis Arrese, psiquiatra y coordinador de la Red de Salud Mental de Gipuzkoa. Años 80.

 

Exterior comunidad Haize Gain. primeros años
Exterior comunidad Haize Gain. 1982.

 

Recorte de prensa, años 80

Recorte de prensa, años 90.

 

Revista creada por los pacientes de Haize Gain

Revista creada por los pacientes de Haize Gain.

 

Revista X Aniversario Haize Gain

Revista X Aniversario Haize Gain

22
Mar

Buenas relaciones pueden hacer milagros

gabriel roldan Angela molnos

Hoy me he despertado temprano, he dormido inquieto, con una presión en el pecho, tengo pocas ganas de comer y hasta me cuesta ir al baño. Estoy en alerta, tengo miedo aunque no sé a qué.

Sé que está situación que vivimos actualmente en relación al coronavirus va a llevar su tiempo. Desconocemos cuanto, a veces se nos va a hacer largo y nuestro estado de ánimo va a a ir cambiando.

Después de una primera etapa de impacto por la novedad, continua una travesía emocional por el túnel de un desierto marciano hasta que veamos más luz.

Recupero recuerdos poco favorecedores de mi recorrido profesional. Me viene a la cabeza la doctora y amiga, Ángela Molnos, antropóloga y psicoanalista húngara residente en Londres. Creo que sería en 1986 cuando Ángela vino a ayudarnos a elaborar la situación posterior al impacto de la irrupción del SIDA y la muerte de los primeros pacientes en la comunidad terapéutica Haize-Gain.

Como director del centro no me sentía muy competente, pues me había imaginado como Churchill arengando a pacientes y equipo a mantener el ánimo ante la zozobra del momento; pero la realidad era que estábamos muy deprimidos. Los silencios eternos se sucedían en los grupos y me costaba hablar, más bien me empequeñecía en la silla hasta casi querer desaparecer; lo cual me daba mucha vergüenza y sentir que no valía lo que hacía.

Ángela nos relató su experiencia de joven durante la guerra en un campo de concentración nazi y lo que a ella le sirvió para vivir. Nos contó en esa mesa de la foto cómo aprendió lo importante que era para la supervivencia el mantenerse vinculado con otras personas y el sentirse parte de un grupo. También que la mirada, o sea, «mirar y ser vistos» era parte fundamental para sentirnos y reconocernos como personas y que la presencia de esos otros servía mucho para mitigar el sentimiento de soledad y angustia tan grande en momentos difíciles.

Nos habló entre otras cosas de «los muertos vivientes», esas personas que vemos en los documentales de la época que con la mirada vacía deambulaban por el campo sin rumbo; pero eso es otra historia, sobre el abandono o la resistencia, o resiliencia ante la depresión.

Con estas reflexiones me relajé mucho.

Desde entonces y no se hasta cuántos años después un cartel presidia la sala de reuniones «buenas relaciones pueden hacer milagros». Ahora que veo a colegas y amigos promoviendo todo tipo de grupos y redes de apoyo y reflexión pienso en esas palabras.

10
Abr

46 Symposium SEPTG en Alcalá de Henares

Hoy hemos finalizado 4 días de debate  y talleres vivenciales en el 46 Symposium de la Sociedad Española de Psicoterapia y Técnicas de Grupo (SEPTG) en la Universidad de Alcalá de Henares, Madrid.

En esta ocasión el el tema central ha sido «Feminidad, masculinidad: Responsabilidad». Han sido unas intensas jornadas de emociones y sentimientos, hemos podido conversar sobre el tema desde diferentes sensibilidades y experiencias de vida.

Además tuve el placer de moderar junto a Maite Pi el grupo grande durante tres días.

Desde aquí quería dar las gracias a todos por la oportunidad profesional y personal.

46 symposium SEPTG

 

46 symposium SEPTG

1
Jun

Impresiones del 45 Symposium SEPTG en Sevilla

septg sevilla

Hace unos días asistí en Sevilla al 45 Symposium SEPTG (Sociedad Española de Psicoterapia y Técnicas de Grupo)  con el título “El cuidado de los grupos: Retos y oportunidades».

Como siempre fueron tres días muy intensos, durante los cuales participé en talleres, grupos de intervisión y en el grupo grande. Concretamente participé en el taller “El bien-estar del cuidador de grupos”, y en la mesa redonda “Cuidado con el grupo. Experiencia, dificultades y retos”.

Siempre es estimulante sumergirse con colegas de diferentes disciplinas y experiencias para reflexionar sobre aspectos del rol profesional y de cómo atendernos y cuidarnos como un aspecto constante para poder desarrollar nuestro trabajo. Formación, terapia y supervisión, tres herramientas básicas que debería realizar de modo constante todo terapeuta.

Me resultaron especialmente interesantes dos conferencias, «Milagros y cuidados en grupos de supervisión psicosocial: experiencias en Guatemala» a cargo de Elisabeth Rohr y «Los grupos: razón y sinrazón del oficio» a cargo de Roberto Inocencio. Elisabeth abordó el tema de como romper el silencio en los grupos para poder hablar de lo que cada uno ha vivido después de haber sufrido situaciones tan traumáticas como una guerra. Roberto nos hizo reflexionar sobre cuestiones como que «elegimos esta profesión para curar-nos» y que «es un viaje permanente que no acaba nunca», donde es peligroso «confundir el personaje con la persona» y «perder la perspectiva de nuestro propio sufrimiento».

En mi intervención en el taller sobre el bienestar sobre el cuidador de grupos donde hicimos una exploración del rol profesional a lo largo de la vida y la situación actual. Me llamó la atención la riqueza y variedad de las experiencias desarrolladas por los participantes del taller, así como su diversidad y el recorrido vital que les ha llevado a desarrollar su profesión como terapeutas. También coordiné un círculo sobre «Experiencias, dificultades y retos en los grupos» con las colegas Amaia Mauriz, María Torrado y Esther Zarandona, donde abordamos diversas temas como el de los grupos de terapia para jóvenes en las fiestas de los pueblos con un fuerte impacto emocional, los grupos de apoyo para padres de bebés y niños pequeños donde se pueden buscar otra referencia sobre el cuidado que no sea internet. También sobre dinámicas grupales de enseñanza dentro de la universidad, con grupos de 100 personas.

En resumen, han sido unos días muy enriquecedores a nivel profesional y personal.

Gabriel Roldán